Agricultura ecológica

La Agricultura Ecológica es la respuesta socio ambiental a los efectos colaterales de la agricultura convencional. Se fundamenta en la utlización de recursos naturales locales e renobables, no admintiendo la utilización de agrotóxcos, abonos químicos de alta solubilidad e organismos modificados geneticamente, buscando el reencuentro del agricultor como protagonista del proceso productivo.


El desarrollo de la agricultura ecológica evita la pérdida del material orgánico del suelo, mejora la calidad del alimento cultivado (su consumo resulta más saludable) y permite interacciones ecológicas, favoreciendo la biodiversidad.

En “Vive la Agricultura”, encontramos el siguiente texto, sobre agricultura ecológica, que considero bastante completo:

“La agricultura ecológica es un sistema de producción agraria y ganadera que proporciona alimentos de la máxima calidad a través de las técnicas más respetuosas con el medioambiente.
Este método de producción prescinde de la utilización de sustancias químicas, como pesticidas, fertilizantes de síntesis y aditivos, con el objetivo obtener alimentos naturales, saludables y con todas sus propiedades nutritivas y a la vez minimizar los efectos negativos sobre el medioambiente”.


“La producción ecológica está regulada por una estricta normativa de la Unión Europea, que recoge exigencias en materia de producción vegetal, animal, así como de inspección, certificación y etiquetado. El resultado es que los alimentos ecológicos están sometidos a unos controles adicionales, realizados por entidades de certificación autorizadas e independientes, que garantizan su autenticidad.
Para identificar un alimento ecológico hay que recordar que la sola mención de los términos “ecológico”, “eco”, “biológico”, “Bio” y “orgánico” está reservada en exclusiva a los alimentos procedentes de la agricultura ecológica. En el etiquetado de estos productos, debe aparecer el nombre o código de la entidad que certifica la autenticidad del producto, que puede estar acompañado de diversos logotipos, entre ellos el europeo”.

“Los productos ecológicos tienen beneficios para ti y también medioambientales y sociales:
Para ti:
-Son alimentos naturales, saludables y con todas sus propiedades nutritivas
En la producción de alimentos ecológicos no se emplean sustancias químicas de síntesis (pesticidas, fertilizantes) y en su elaboración no se utilizan ni organismos modificados genéticamente ni radiaciones ionizantes. Los ingredientes no agrarios, como aditivos, aromatizantes o sales, están limitados enormemente, restringiéndose a los que resultan imprescindibles para la elaboración del producto final. Este particular método de elaboración garantiza que los alimentos conservan sus propiedades nutritivas y son de la mayor calidad.

"La agricultura es la más noble de todas las alquimias, porque
convierte a la tierra y aun a la majada en oro y, además, da al
cultivador un premio de salud" –Thomas Jefferson

-Por su sabor y diversidad
En encuestas realizadas a consumidores ecológicos españoles, como segundo motivo para su elección, después de que son saludables, se alega su mejor sabor. Los productos ecológicos además de ser sabrosos cubren una gama amplísima, desde las tradicionales frutas y hortalizas frescas, hasta la miel, las carnes, las conservas, los quesos y embutidos, el vino, el aceite de oliva, la variedad está asegurada

-Son de calidad certificada
Además de los controles oficiales que se efectúan a todos los alimentos, los productos ecológicos son objeto de una certificación adicional que garantiza la autenticidad de su origen ecológico. Entidades de certificación autorizadas y supervisadas por las administraciones autonómicas, inspeccionan cada año a todas las explotaciones e industrias agroalimentarias ecológicas. En los alimentos ecológicos la tratabilidad y autenticidad están garantizadas.

Para el medioambiente:
-De producción sostenible
La agricultura ecológica es un medio de producción agraria y ganadera sostenible, es decir perdurable, que hace un uso racional de los recursos naturales, agua, aire, suelo y no los compromete para generaciones futuras.

-Evitan la contaminación y favorecen la biodiversidad
Los alimentos ecológicos, al prescindir de sustancias químicas de síntesis, evitan la contaminación del aire, suelo y agua que originan los fertilizantes solubles como los nitratos, o los pesticidas. Este entorno más limpio, unido a técnicas culturales más respetuosas, genera un aumento de la actividad biológica del suelo, de su fertilidad, evita la erosión y contribuye a aumentar biodiversidad asociada a los ecosistemas agrarios”.


“-Contribuyen al desarrollo de las zonas rurales
Indirectamente, la práctica de la agricultura ecológica permite una diversificación de las producciones y el aumento del valor añadido del producto final. Además los análisis ponen de manifiesto que la agricultura ecológica requiere un mayor volumen de trabajo, por lo que genera empleo en las zonas rurales. Los alimentos ecológicos fomentan la sostenibilidad medioambiental y social.

Todo esto evidencia que la agricultura ecológica se presenta como una alternativa inteligente, que persigue unos objetivos deseables y conlleva beneficios de peso.
La gama de productos ecológicos que podemos consumir es muy variada: frutas, verduras y hortalizas, carne, huevos, miel… Nuestro país reúne las condiciones necesarias para producirlos”.

“En cuanto a la agricultura, contamos con una climatología favorable y habitualmente se emplean sistemas extensivos de producción. Respecto a la ganadería, la conservación de un patrimonio genético importante de razas autóctonas, de gran rusticidad en su mayoría y adaptadas al medio, favorece su cría y explotación en régimen extensivo. Todo ello, sin olvidar la tradición y desarrollo alcanzados por la apicultura, cuyo manejo cuidadoso ha dado lugar a la obtención de productos de gran calidad por la abundancia y variedad de la flora melífera existente en España.
En nuestro país, la práctica de la agricultura ecológica comenzó a finales de los años 80; inicialmente, el crecimiento del sector fue exponencial y más recientemente se ha producido una desaceleración de su desarrollo. El panorama actual es el siguiente, según datos del MAPA de diciembre de 2005:

- Los cultivos, prados y pastizales ecológicos ocupan un 2,48% de la Superficie Agraria Útil española, alrededor de 800.000 hectáreas.

- La producción alcanzaba un valor estimado en 2004 de 250 millones de euros y algo más de 1.700 industrias de transformación.

- Este sector emplea aproximadamente a 17.500 personas físicas y jurídicas.

- Aproximadamente el 80% de la producción española de productos ecológicos se exporta. Sobre todo a Europa, y en especial a Alemania, Holanda, Francia y Reino Unido, a donde llegan sobre todo productos frescos.

Haciendo un rápido análisis regional del sector ecológico se aprecia que las comunidades autónomas más relevantes en materia de agricultura ecológica son Andalucía y Extremadura (ambas por su elevada superficie y número de operadores) y Cataluña (por la concentración relativa de industrias de elaboración de producto ecológico procesado y por el dinamismo de su mercado)”.
(Fuente: http://www.vivelaagriculturaecologica.com/)

Ahora bien, la agricultura ecológica a más de uno fascinó. Sin embargo, volver al campo no es cosa para cualquiera. La vida en el campo hoy, a pesar de existir máquinas que nos hacen casi todo, estas cuestan dinero y tienen un coste de mantenimiento elevado. La tierra ya no es lo que era antes: el incremento del consumismo hizo que el aire y el agua llevaran la contaminación a todas partes y, la tierra ya no produce lo mismo... Los productos ecológicos ya tienen mucha competencia y lo que es peor, nuestro cuerpo y nuestra psicología ya se han distanciado mucho del mundo rural. Las largas noches de invierno, la convivencia con pocas personas y, de diferentes niveles culturales por ejemplo, pueden crearnos diferentes problemas psicológicos...


He conocido a unos novios que compraron unas tierras con casa vieja, con el interés de ir a vivir allí y crear un negocio ecológico.
Mientras tanto, desde la ciudad iban fines de semana a planificar el deseado sueño. Los padres, todos contentos, los acompañaban. No obstante, al poco tiempo, estos, que hicieron el elevado desembolso, ya estaban perdiendo la ilusión inicial, viendo a la pareja querer trabajar el campo desde el ordenador; ... con el tiempo y, con sufrimiento, irán aprendiendo...
Querer es poder y con ganas e ilusión y, especialmente, con disciplina y lo que es más importante, amando realmente a los animales y a la propia naturaleza, se puede disfrutar del poder de la misma. La naturaleza aún nos reserva muchos secretos y, naturalmente, estoy convencido de que la calidad de vida, es más elevada desde muchos puntos de vista.

En España, tenemos a un gran propulsor de la Agricultura Ecológica que es Don Mariano Bueno. En su página: http://www.mariano-bueno.com/, tenemos información de sus libros, cursos, videos y artículos que pueden ser de gran utilidad para quienes deseen estudiar o empezar a trabajar en el campo de forma sana. Incluso para cualquiera con interés de mejorar su calidad de vida.

Agricultura Biodinámica.

También tenemos la Agricultura Biodinámica. Su origen se encuentra en una serie de conferencias dictadas por Rudolf Steiner, filósofo y científico austriaco que creó un movimiento espiritual denominado “antroposofía”. Más tarde, María Thun profundizó sobre la agricultura biodinámica, creando el ya conocido y muy usado, calendario biodinámico.

En la práctica, la biodinámica utiliza medios naturales y sostenibles para sus cultivos, parecidos a la agricultura ecológica, como rotaciones de cultivos, compost elaborado con estiércol de los animales, control de hierbas malas y enfermedades utilizando materiales procedentes de plantas y minerales. El calendario Biodinámico se edita todos los años y, en él tenemos las épocas de siembra, cultivo y cosechas y los días favorables para el apicultor.
Se aprovechan los valores esotéricos propios de la alquimia medieval y de la astrología; los ritmos, fuerzas y energías “cósmicas” que influyen en todos los seres vivos. Las plantas, los animales y el ser humano trabajamos interconectados como un único organismo.

Los signos del Zodíaco y la posición de los astros, determinan los mejores momentos para realizar las siembras o labores de cultivo.
En España existe una asociación de Agricultores Biodinámicos. En la página http://www.asoc-biodinamica.es/, podemos encontrar más información de interés sobre ello.


De interés para quien desee más información:
http://www.mariano-bueno.com/biografia.htm
http://es.wikipedia.org/wiki/Agricultura_ecol%C3%B3gica
http://blogs.periodistadigital.com/corrupcionglobal.php/2007/09/11/p115614
http://ec.europa.eu/agriculture/organic/organic-farming/what-organic_es
http://www.criecv.org/es/ae/index.html

Ecología. Qué hacemos y qué podemos hacer para ser más ecológicos.

De una forma fácil, se puede decir que ser ecológico equivale a mantener una buena relación con el medio ambiente. Contemplando por un lado la influencia del medio en el hombre y la adaptación de la comunidad humana al medio y, por otro, la acción del hombre en el medio en lo que respecta a aspectos económicos, físicos, culturales y otros.


Debido al gran desarrollo industrial, científico y tecnológico, en los últimos años (con una pincelada de egoísmo y consumismo de fondo), el hombre ejerció y está ejerciendo una acción, sin precedentes en la historia de la Tierra, sobre el equilibrio ecológico de la misma. En nuestro provecho, para progresar económicamente, hemos modificado el ambiente y, bien sea por desconocimiento o por no querer tener en cuenta las leyes naturales, hemos provocado en los ecosistemas reacciones muy perjudiciales.

La biodiversidad silvestre y agrícola se está perdiendo y en su lugar aparece el monocultivo. La utilización de productos químicos como las insecticidas y otros muchos es otro ejemplo más; y, así, la tierra poco a poco va perdiendo su fertilidad. La repetición del mismo cultivo, tala de árboles, incendios forestales, uso masivo de plaguicidas, adopción de sistemas de transgénicos intensivos, lleva a la erosión del propio terreno y, actualmente, la desertización y erosión terrenal excede a la formación de tierras nuevas con lo que privamos a la tierra de su propia fertilidad inherente.

La pesca excesiva conlleva a la disminución de peces adultos capaces de reproducirse, por lo que el tamaño de las capturas disminuye de año en año.

En fin, como resumen, podremos decir que la sobreproducción deja tras de sí suelos agotados, océanos esquilmados y aguas y atmósfera contaminada.


Así pues, la ecología tiene por objetivo hacer que la mano del hombre con el uso de la ciencia y la tecnología, no influya negativamente o que esta influencia sea lo mínimo posible, en el ecosistema o sistema formado por organismos de distintas especies y el ambiente que las rodea.

El funcionamiento correcto de un ecosistema debe de funcionar de forma equilibrada con la acción natural de todas las especies.

En determinado lugar de África había muchas serpientes que sobrevivían de los ratones que había, los vecinos siempre habían convivido con ambos animales sin grandes conflictos. En determinado momento, se determinó, por consenso, eliminar a los reptiles (tal vez alguien haya comenzado a sentir asco por dicho animal); No obstante, con el paso del tiempo, la familia de los ratones se incrementó de forma alarmante, hasta que la solución más razonable fue la de volver a dar entrada a la amiga serpiente.

El mantenimiento del ecosistema exige que haya regulación entre todos los elementos que lo componen. Cuanto mayor sea su diversidad más estable será y al revés.

Desde hace ya varias décadas surgieron varios organismos para estudiar y hacer frente al grave problema de la contaminación y cambio climático pero, ¿habrá solución?.

Sinceramente, parece difícil bajar el nivel de consumismo y por lo tanto disminuir la contaminación si no empezamos a dar ejemplo cada uno de nosotros con nuestro comportamiento individual. Y para ello necesitamos conocer nuestra psicología, sí, nuestros pensamientos, emociones y deseos para controlarlos. Muy poco podremos hacer por el bien del planeta y de la sociedad si no empezamos por nosotros mismos. La sabiduría sobre nosotros nos da también conocimiento y comprensión sobre los demás, sobre el propio planeta Tierra. En determinado programa de radio las personas opinaban por teléfono sobre lo que cada uno hacía para disminuir la contaminación, había personas que decían que nadie más que ellos había que hicieran tanto..., y sólo hablaban de dos o tres cosas insignificantes, como cuidar de no gastar mucha agua, tener cuidado de apagar las luces, y algunas otras que, obviamente, tienen su valor pero, repito, son insignificantes.

“La tierra tiene una piel, y esa piel tiene enfermedades. Una de esas enfermedades se llama hombre”. -Nietzsche

Nuestros deseos alimentados por nuestros sueños de egoísmo, orgullo, etc., hacen que derrochemos inmensa energía innecesaria y, por lo tanto que estemos contaminando el ambiente continuamente.

"La naturaleza hace que los hombres nos parezcamos unos a otros y nos juntemos,
la educación hace que seamos diferentes y que nos alejemos." -Confucio

Veamos: Un coche de más potencia, siempre va a consumir y contaminar más; a velocidades excesivas, ocurre lo mismo -el consumo medio más bajo es a menos de 100 km/h-, si sobrepasamos esta velocidad en un 25 %, el consumo se dispara a un 40 % más; si frenamos y aceleramos con frecuencia (fruto de preocupaciones u otras circunstancias), ídem de lo mismo. Con la ventanilla abierta se puede consumir un 5% más o más aún según la velocidad. Usar el propio coche para hacer un viaje transportando una sola persona cuando lo podremos hacer en autobús, conlleva a colaborar en el mismo mal; o, hacer un viaje en coche para ir sólo a tomar un café, etc. ¡Cuantos viajes se realizan hoy en día por placer! Irse de vacaciones a lugares distantes, muchas veces sólo, a disfrutar o simplemente, porque los demás van, es algo nuevo que antes no se hacía, se viajaba pero eran por otros motivos y no para ir a dormir a la playa, por ejemplo. ¿Cuánto no se contamina en inmensos viajes de automóviles, autocares, barcos, aviones, etc., que se usan para este disfrute?. Nuestra ropa, utensilios, etc., cuantos más compremos más estaremos aumentando en el consumo de energía y su consiguiente contaminación. Igualmente, con la comida y bebida; se come más que nunca y sin embargo, hacemos menos ejercicio, usamos inmensos envases de alimentos y bebidas que luego despejamos y contaminamos sin darnos cuenta de la energía que fue necesaria para producirlos.

En la industria, en nuestro negocio, trabajo del campo, etc., lo que nos preocupa es que la producción sea alta pero no los efluentes, desperdicios, agentes químicos que usemos, etc. Todos los utensilios que usamos como el coche, ordenador, casa, muebles, electrodomésticos, etc., han consumido energía y contaminado el ambiente en su fabricación y, al sustituirlos inadecuadamente, muchas veces porque pasaron de moda hará que colaboraremos negativamente, también. En la calefacción y aire acondicionado, el mayor ahorro radica en un buen aislamiento térmico (especialmente, ventanas térmicas con cristales dobles “climalit”) en donde se puede ahorrar del orden del 25 %; en el interior con una temperatura de 19 a 20 ºC es suficiente y, por cada grado que subamos, aumentaremos el consumo en un 7% aproximadamente; de igual manera quien use el aire acondicionado en verano, con 24-26 ºC de temperatura ambiente, sería lo correcto y, por cada grado que se disminuya, se aumentará el consumo en un 7 % también y, además, cuanto mayor sea la diferencia de temperatura con el exterior, más sufrirá nuestro organismo al salir de casa o al entrar. Otras medidas sobre ahorro energético en viviendas, se pueden consultar en las compañías eléctricas, departamentos de industria, etc., pero, lo importante es que haya conocimiento y, especialmente, interés y buena disposición.


En fin, muchos más ejemplos se pueden poner sobre los que deberíamos de reflexionar de sí estamos haciendo lo necesario o podríamos hacer más. Por supuesto, que también deberemos reflexionar sobre el uso que estamos dando al agua que gastamos y cómo son los efluentes de fregar, lavar, etc., así como la basura que todos los días generamos...

“Siempre escuchamos acerca de un mejor medio ambiente, de la paz mundial, la no violencia y demás, pero esas metas no se logran a través de la aplicación de regulaciones o resoluciones de las Naciones Unidas; se requiere de la transformación individual. (…) será muy difícil lograr estas cosas a menos que los individuos lleven a acabo un cambio dentro de sus propias mentes”. –Dalai Lama

Nosotros mismos, es el punto de partida y, si no empezamos a cambiar nuestro comportamiento, poco podremos hacer sobre los demás, sobre el Planeta Tierra. Se dice que de tal palo tal astilla y que de tal padre tal hijo... También es frecuente oír decir: “yo, que tenga para comer y dormir y que llueva, que la vida son dos días y hay que vivirlos...”. Con frases así, nada estamos haciendo. Y, la verdad es que todos en mayor o menor medida, deberíamos de cambiar los hábitos descritos arriba y, por supuesto, otros muchos no expuestos aquí.

Predicar con el ejemplo es la mejor forma de colaborar en todo y especialmente, en el tema que estamos tratando.

Bueno será que dejemos de preocuparnos y de hablar de lo que hacen los demás y empecemos a ser economistas con nosotros mismos, el cuidado con nuestra salud, con nuestra alimentación, con lo que compramos y con nuestro comportamiento en general, será un buen comienzo.

El próximo tema estará dedicado a la agricultura ecológica.

Ecología y Cambio Climático. Capítulo VI

La historia nos ofrece informaciones que nos vienen a decir que estos cambios climáticos ya existieron en el pasado.

Ya se empieza a hablar de una nueva Edad del Hielo. En muchos periódicos aparecen frecuentemente, artículos como este: “El cambio climático amenaza con una nueva edad de hielo” en el periódico El Mundo. O, este otro: ¿Calor o nueva edad de hielo? en el periódico El País.

En el Génesis nos encontramos con el conocido Diluvio Universal. Muchos relatos existen en los cinco continentes parecidos al Diluvio Bíblico, entre los que destaca el Diluvio Tolteca, que nos demuestra que también ocurrió en otros continentes. Parece obvio que tuvo que ser una gran catástrofe pero, también Platón, nos habla de la desaparición de la Atlántida “una isla más grande que Libia y Asia juntas”. ¿Quién sabe si todas estas catástrofes no estarían relacionadas entre sí y no habrán sido las que también dieron lugar a un anterior cambio climático?

En tiempos aún más remotos, se nos habla de otro continente de gran extensión llamado Lemuria, que habrá existido sobre el Océano Pacífico y, que según algunas crónicas, la conocida Isla de Pascua con sus misteriosos moáis, formaría parte del mismo.

Se dice que la desaparición de los dinosaurios fue debido a la caída de un meteorito, dejando su huella en el cráter de Chicxulub.

También, en el origen de la formación del petróleo, se escribe que fue la misma causa. Leer artículo: El Origen del Petróleo, de Plataforma de Investigación.

Entonces, parece que se están dando bastantes circunstancias para que este Cambio Climático pueda suceder. No obstante, la desaparición de una gran isla como la Atlántida o otras, no podría ser sin una catástrofe aún de mayores dimensiones pues, tendría que haber grandes sacudidas, movimientos de tierras, etc.

La Ramera de Babilonia sobre la bestia de “7 Cabezas Capitales

Muchas predicciones existen sobre el Fin del Mundo. Una de las mas recientes, es la descrita en el libro “Hercólubus o Planeta Rojo”. Libro de pocas páginas, que trata de otros temas de psicología.

No es mi pretensión ser catastrofista, sólo trato de exponer síntesis de acontecimientos, de escritos y, que cada cual saque sus conclusiones.

Sobre los acontecimientos exteriores muy poco podemos hacer, sin embargo, mucho si modificamos nuestra propia conducta. Pienso que lo único cierto es que todos nacimos para morir y que la vida la debiéramos de ver como una Escuela a la que se viene para aprender.

Nos hemos refugiado en lo exterior, en lo material y, deberíamos tener más tiempo para nosotros mismos, para conocer mejor nuestra propia psicología, nuestros pensamientos, nuestros deseos, emociones, etc. Lo que somos, lo que realmente queremos en esta vida. El tiempo pasa muy deprisa y la vejez, la muerte, está a la vuelta de la esquina. G.I. Gurdjieff nos dice en “La Última Hora de Vida” que “... somos muertos vivientes..” os aconsejo que lo leáis.

Cuando estudiaba, alguien me dio un póster con una bonita imagen y una frase que decía: “Busca la Paz dentro de ti y busca dentro de ti mismo el Divino Aliento de la Vida”, cada día que pasa estoy más convencido de que la Verdadera Felicidad sólo la encontramos en nuestro interior. Pero para ello es necesario que nos demos cuenta de nuestro egocentrismo; de mirar a nuestro alrededor para ver cuáles son nuestras necesidades fundamentales y luchar así contra todo condicionamiento de marketing, modas, etc. Parece razonable que no debemos despreciar las cosas que la vida nos ofrece pero, otra cosa es la necesidad y el uso.

Con lo anterior, pongo fin al tema agrio del Cambio Climático, a no ser que alguien esté interesado en que me extienda más sobre alguno de los aspectos comentados.

El próximo capítulo ya será sobre Ecología.

Manuel López Mera

Ecología y Cambio Climático. Capítulo V

Hemos creado una sociedad que nos valora por lo que somos, por lo que tenemos y, tanto tenemos tanto valemos... Ya no nos sirve un simple coche para nuestras necesidades, sino uno de marca para no ser menos que nuestro amigo o vecino...., Si nuestro amigo compró una casa en el campo para pasar los fines de semana, también nosotros terminaremos haciendo lo mismo, etc., etc. Y, lo peor de todo es que nos dejamos llevar por ese dilema. Las madres cuando hablan de sus hijos, hablan de ellos por su trabajo, lo que ganan, lo que tienen, etc., y no por lo que ellos son como personas: ¡mis hijos son los mejores, trabajan en esto y tienen esto y aquello,..! ¿Qué madre, no repite hoy en día, esta frase, en relación a sus hijos,? Hasta los médicos, sus números de clientes, el número de operaciones que llevan, etc., indican su posición profesional (no me estoy refiriendo a todos claro, pero a un gran número).

Cuánta industria existe hoy, simplemente para satisfacer nuestro egoísmo, nuestros vicios. Pensemos cómo sería la sociedad, sin tanta industria dedicada a producir alcohol, tabaco, drogas, cosmética, joyas, gafas para lucir sobre el pelo, bolsas con la única finalidad de lucir, etc.; tantos negocios dedicados únicamente a la especulación. Cuánto dinero se gasta en propaganda política, y de todo género. En fin, si no fuera por el Capitalismo y el Egoísmo, habría mucho dinero para emplear en innumerables recursos y, por supuesto, ahora no tendríamos el grado de contaminación existente.

Dirán muchos: pero ¿qué sería de tanta gente empleada en estos menesteres?; bueno, yo creo que la mayor parte del capital generado en estas situaciones va para unos cuantos imperios, para unos cuantos “señores”. Si no fuera así, pequeñas empresas con mucha más necesidad de mano de obra producirían artículos más necesarios y duraderos, ....

Por todo ello, se puede decir que, la peor contaminación existe dentro de nosotros mismos.

La frase “la culpa es de tal y tal...”, ya se ha convertido en un dilema corriente y: ...si no llueve, la culpa es del Gobierno; si llueve mucho y hay catástrofes, también, la culpa es del Gobierno; la Oposición y el pueblo culpan al Gobierno por cualquier cosa y, el Gobierno hecha los males a la Oposición por lo que hizo en le pasado. Así todos los males son por culpa de los demás y nosotros somos siempre las víctimas.

Abandonar el consumismo es difícil. Invertir esta situación de consumismo, contaminación y cambio climático no parece nada fácil, por no decir imposible. Ya hay científicos que nos hablan de ello, tal como James Hansen, uno de los mayores especialistas de la NASA, que nos dice en un artículo del periódico El País: “Ni las metas más exigentes para luchar contra el cambio climático, las establecidas por la Unión Europea, son suficientes...”.

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Ya todos somos adictos a la electricidad, medios de transporte (los caballos ya no nos sirven), ordenador, teléfono, etc. y, muchas veces compramos cosas sin una necesidad primordial. La elección la hacemos, la mayor parte de las veces, en función de nuestro Egoísmo; y, otras veces, el propio Capitalismo nos obligan a cambiar de determinados utensilios, ya casi imprescindibles, como el ordenador, electrodomésticos, etc., para ellos poder alimentar sus máquinas... Con este sistema que hemos creado entre todos, nos contaminamos y contaminamos más al ambiente.

Con todo lo anteriormente comentado, se puede deducir que cada uno de nosotros, al menos en gran medida, sí hemos tenido y tenemos bastante culpabilidad (más adelante trataremos de qué otras influencias puede haber, también, en ello), en este Cambio Climático que se está dando y que no se sabe a dónde nos llevará.

(Continuará)

Ecología y Cambio Climático. Capítulo IV

Haciendo mis envestigacinones en la Net, encontré un artículo de Luis L., en “la-geoingenieria-solucion-para–el-cambio-climatico”, en donde se hace un comentario sobre el Cambio Climático, que me parece hasta cierto punto interesante (aunque no concuerdo en algunos aspectos), a cerca de cuál es la causa y qué podemos hacer.

Personalmente, pienso que hay dos razones fundamentales: Una Exterior y otra Interior, sobre las que voy a dar mi opinión.

La primera razón, la exterior: Hemos creado la Industria y con ella el Capitalismo y nos convertimos en personas capitalistas y consumidoras.

“PODEROSO CABALLERO ES

DON DINERO...” PERO,

¡CUÁNTO SUFRIMIENTO POR

EL CAMINO SEMBRANDO VA!

La Industria precisa de fabricar y vender y el hombre consume y contamina, por otra parte, el Capitalismo necesita de la industria.

Difícilmente, vamos a invertir este aspecto. Así, los países más capitalistas generan más contaminación. Poco le importa a una fábrica de coches, cervezas, conservas, etc. la contaminación. A ellos, lo que les interesa es producir y vender. Ahora se habla de biocombustible, pero tan pronto se creó esta industria, ya poco les importa al Imperio que las controla las consecuencias, como por ejemplo el hambre que aumentó en determinados países por encarecer los alimentos.

El Capitalismo se fundamenta en el Egoísmo y con egoísmo ni cuidamos el medio ambiente para evitar la profundización del cambio climático ni alimetamos a nuestros semejantes hambrientos.

Todos nosotros, en nuestro trabajo, estamos obligados a producir y cuántas más necesidades materiales asimilemos mayores serán nuestras necesidades económicas y mayor producción nos exigirán. La Globalización, hizo que las grandes multinacionales se dividan el comercio y ahora nos controlan a sus anchas (para ellas sí que fue un gran revolución). Esa es la realidad. Quizás esto sea una confirmación de la época del “Anticristo” –materialismo excesivo-, tan mencionado en muchos textos.

Ahora bien, se dice que “atraemos lo que somos internamente...” con ello quiero referirme a la segunda razón, en este caso “interna a cada uno de nosotros”. Me refiero al Egoísmo, al Odio, Envidia, etc., que todos nosotros hemos engordado bastante en nuestro interior y, especialmente desde la era industrial y me refiero en general porque, Egoismo, Odio, etc., por supuesto que siempre hubo. Muy a menudo se dice que la tv pone “programas-basura”; pero, la tv pone lo que se vende y la sociedad, nosotros, lo compramos. La mayoría de las películas con mayor éxito, son de Sexo y de Terror pero, ¡es lo que se compra!.

El ser humano se está conviertiendo en máquina, instrumento, objeto, etc.; cualquier cosa menos lo que debiera ser: “persona”, un ser en plena armonía con la Naturaleza, con el Medio Ambiente y consigo propio.

Para finalizar este capítulo, os recomiendo que leáis la conmovedora carta que el Jefe Indio Seattle escribe al Presidente de los EEUU, en el año 1855 como respuesta a su oferta de compra de las tierras Suwamish. En ella podemos leer: “...De una cosa estamos seguros: la tierra no pertenece al hombre; es el hombre el que pertenece a la tierra, ...”. La lectura de este texto, aunque sea por segunda vez, nos sirve, realmente, para una profunda reflexión sobre cómo estamos tratando a la Tierra y sus consecuencias.

Algo más sobre contaminación y capitalismo.

¿Aún existen posibilidades de invertir este ciclo?

¿Será que estos cambios ya existieron en el pasado?

¿La culpa es del hombre o es, simplemente, cíclica en el tiempo?

¿Qué podemos hacer?

Ecología y Salud Ecológica

En próximos capítulos trataré de hablar sobre estos aspectos, desde mi punto de vista y con la ayuda de la Net. Espero que mis aportaciones, colaboren un poquito en lo positivo.

(Continuará)

Ecología y Cambio Climático. Capítulo III

¿Por qué contaminamos y cuáles son las consecuencias de la Contaminación?

No cabe duda que el grado de Contaminación ya es tan evidente, en el agua que bebemos, en el aire que respiramos y en la tierra en donde crecen nuestros alimentos que, nadie pone en causa que esta contaminación, además de ser nociba para el ser humano también lo es para el Planeta Tierra y que la situación es bastante grave.

Las leyes, de “Acción y Reacción”, “acción y consecuencia”, “Karma y Dharma”, etc., se manifiestan en todo. Si a nuestro coche de gasolina le ponemos algo de agua en el depósito, éste no funcionará o no lo hará con la misma potencia o, si andamos nerviosos, acelerando y frenando, gastaremos más combustible, más pneumáticos, etc. Si nos alimentamos mal, nuestro cuerpo responderá con enfermedades. De la misma forma, el Planeta Tierra, como organismo vivo, reacciona según cómo lo tratemos.

Cuando ocurrió lo del Prestig, un pescador decía en una entrevista por la TV. que: “... no se podía dejar el petróleo allá abajo porque el mar, antes o después lo bomitaría; su experiencia le decía que todo lo que le echábamos encima lo terminaba bomitando...” Esto lo vemos, también, en las playas, cantidad de basura que nos devuelve.

Cuando el Gobierno Francés, con su Presidente Chirac, queriendo mostrar al mundo su gran poderío, realizó alguna de sus muchas experiencias nucleares en “sus Islas del Pacífico”, en el año 1995, resultó que, precisamente, en aquella época y, al otro extremo del Planeta, en Galicia, aparecieron innumerables temblores de tierra que no eran costumbre (ver artículo del Pais de 23/05/97) y, 3 años después de haber cesado estas experiencias, también se dajaron de notar estos fenómenos ¡Curioso!.

Luego, si echamos cantidades de materias contaminantes al mar, a la tierra y al aire, tendremos más maremotos, fenómenos del Niño y Niña,... terremotos, lluvias ácidas, efecto invernadero, más huracanes, tornados, sismos, etc., etc. Es decir, aparece el llamado Cambio Climático.

(Continuará)

Ecología y Cambio Climático. Capítulo II

El tema de la contaminación ya es tan preocupante que cantidades de artículos, videos, conferencias, etc., a nivel mundial, alertan hoy sobre sus graves consecuencias. Sobre ello vamos hoy a continuar tratando, haciendo una síntesis general del tema.

El porcentaje de Dióxido de Carbono en el aire está aumentando de día en día. Se dice que la industria expulsa al aire por año, del orden de 20.000.000 Tn de CO2, (4 Tn por persona). Las emisiones del sector del automóvil, aumentan un 5% por año. Por otro lado, sabemos que los Sprays están haciendo un gran agujero en la capa de ozono, con las consecuencias correspondientes.

En ciertas megápolis no es extraño ver personas paseando por sus calles con máscaras para protegerse de la contaminación del aire. En otras, como en México, ya aparecen empresarios que se aprovechan de ello para hacerse sus “Santas Pascuas”...

También la tierra ya no es la de antes. En la agricultura moderna, usamos cantidades de plaguicidas, fertilizantes, etc, que junto a otros residuos contaminantes como residuos sólidos provenientes no sólo de las ciudades sino los que en todo lugar vamos todos generando y exponiendo en mayor o menor grado. De esta moderna agricultura, obtenemos unas cosechas abundantes pero poco saludables (de esto hablaremos en próximos días). La quema de montes y bosques, la tala descontrolada de árboles, etc., contribuye también negativamente. Con todo ello, vamos colaborando para que de una tierra casi virgen y productiva en un 100% la transformemos, en poco tiempo, en una tierra no productiva y desértil.

La catástrofe ambiental debido al accidente nuclear de Chernobil, ocurrido el 26 de abril de 1986, nos da una idea del peligro y tamaño de la contaminación por la radioactividad nuclear.

A las aguas de los ríos, mares y océanos vertemos enormes cantidades de productos contaminantes especialmente aguas residuales producidas en las ciudades y áreas urbanas, residuos líquidos con deficientes niveles de tratamientos o directamente sin tratamiento alguno cargados de materiales orgánicos, basuras, detergentes, aceites usados,...; sustancias químicas y, a veces, radioactivas de accidentes de barcos (recordemos el accidente del “Prestige”, el siniestro del buque “Mar Egeo” que sufrió en La Coruña el 3 de diciembre de 1992, el hundimiento del carguero francés en 1984 “Mont-Louis” con material radioactivo, y otros).

Muchos peces que hoy comemos están contaminados, en su interior almacenan porcentajes importantes de metales pesados, como el mercurio. Enfermedades como la tifoidea y la hepatitis son trasmitidas por mariscos provenientes de aguas contaminadas.

Cantidades enormes de peces mueren envenenados por la descarga directa de contaminantes al agua.

Imágenes como esta suelen verse con frecuencia, últimamente, en la mayoría de los periódicos.

Las multinacionales están convertiendo el agua en su “negocio”

“Agua embotellada, a precio de oro” (artículo de la revista “Integral”).

No es de estrañar que cantidades de manantiales próximos a las ciudades vayan desapareciendo poco a poco...

Muchas cosas se pueden decir sobre el estado de contaminación a que hemos sometido y continuamos sometiendo al Planeta Tierra. En la net hay inmensos artículos y videos en donde se puede ampliar este tema.

Pero, ¿a dónde nos llevará este camino que hemos elegido?, ¿Quién es el culpable?, ¿Habrá solución?

En próximos capítulos comentaremos sobre esto y más.

Ecología y Cambio Climático. Capítulo I

Tanto el término de Ecología como el de Cambio Climático, son hoy por hoy muy usados por los políticos, periodistas, escritores, etc. Sin embargo, antes de los años 60, poco o nada se hablaba y sabía de ellos e, inclusive, quien hablara sobre ello, era muchas veces, mal visto y criticado como pesimista, negativista, catastrofista, etc.

El término Ecología aunque ya viene de 1866 definido por Heackel como la "ciencia que estudia las relaciones de los seres vivos con su ambiente", no será hasta los años 50-70 que se comienza a hablar de una forma mas notoria pero aún en estado incipiente Parece ser que el deterioro de determinadas zonas protegidas por el comienzo del turismo contribuyó también al alimento de esta terminología. Será entonces, a partir de los 70 que ya empiezan a aparecer otros términos relacionados, tales como: Agricultura Ecológica, Biológica, Biodinámica, Medio Ambiente, Salud Ecológica, etc.

Paralelamente, en estos años, se empieza a hablar de Contaminación, definida como "la introducción de cualquier sustancia o forma de energía con potencial para provocar daños, irreversibles o no, en el medio inicial".

Recuerdo, cuando aún siendo niño, por los años 60, en un riachuelo cercano a mi aldea, se veían truchas por todo lado; yo mismo, en verano, cuando se andaba perfectamente sobre el río, saltando de piedra en piedra, no me resultaba difícil coger truchas con las manos y es que en cualquier pequeño regato de agua, era posible encontrar truchas, incluso se veían en las pequeñas presas que conducían agua por los prados. Hoy, estos comentarios parecen salidos del baúl de los recuerdos y ya suenan a tiempos de María Castaña, diría alguien...

Otros términos que van apareciendo en simultáneo serán los de: Contaminación Hídrica, del Suelo, Acústica, Química, Radiactiva, Microbiológica, etc. y que, todo ello, daría lugar al denominado "Cambio Climático", tan en moda hoy en día.

Se puede decir, entonces, que Ecología y Cambio Climático están íntimamente relacionados entre sí.

Me propongo con este primer capítulo centrarnos primeramente, en el tema del Cambio Climático. Para ello, os incluyo un capítulo titulado "La Cruda Realidad de los Hechos" retirado del libro "La Gran Rebelión".

Leerlo y que cada cual saque sus conclusiones. Desde mi punto de vista, parece una premonición de la situación actual que estamos teniendo. Escrito a comienzos de los años 70, nos encontramos con la predicción de ciertos fenómenos que hoy constatamos como ciertos.

En el próximo capítulo Titulado Cambio Climático II, os pondré un video que nos mostrará cómo están aconteciendo estos cambios climáticos.


“La Gran Rebelión”
LA CRUDA REALIDAD DE LOS HECHOS

Pronto millones de habitantes de África, Asia y América Latina, pueden morir de hambre.

El gas que arrojan los "Spray", puede acabar radicalmente con el Ozono de la atmósfera terrestre.

Algunos sabios pronostican que para el año Dos Mil se agotará el Subsuelo de nuestro globo terráqueo.

Las especies marítimas están muriendo debido a la contaminación de los mares, esto ya está demostrado.

Incuestionablemente al paso que vamos para finales de este siglo todos los habitantes de las grandes ciudades deberán usar Máscaras de Oxígeno para defenderse del humo.

De continuar la contaminación en su forma alarmante actual antes de poco tiempo ya no será posible comer peces, estos últimos viviendo en agua así, totalmente contaminada serán peligrosos para la salud.

Antes del año Dos Mil será casi imposible encontrar una playa donde uno pueda bañarse con agua pura.

Debido al desmedido consumo, y explotación del suelo y del subsuelo, pronto las tierras ya no podrán producir los elementos agrícolas necesarios para la alimentación de las gentes.

El "Animal Intelectual", equivocadamente llamado hombre, al contaminar los mares con tanta inmundicia, envenenar el aire con el humo de los carros y de sus fábricas y destruir la Tierra con sus explosiones atómicas subterráneas y abuso de elementos perjudiciales para la corteza terrestre, es claro que ha sometido al Planeta Tierra, a una larga y espantosa agonía que indubitablemente habrá de concluir con una Gran Catástrofe.
Difícilmente el mundo podrá cruzar el umbral del año Dos Mil, ya que el "Animal Intelectual" está destruyendo el ambiente natural a mil por hora.

El "Mamífero Racional", equivocadamente llamado hombre, está empeñado en destruir la Tierra, quiere hacerla inhabitable, y es obvio que lo está logrando.

En cuanto a los Mares se refiere, es ostensible que éstos han sido convertidos por todas las naciones en una especie de Gran Basurero.

El Setenta por Ciento de toda la basura del mundo está yendo a cada uno de los mares.

Enormes cantidades de petróleo, insecticidas de toda clase, múltiples substancias químicas, gases venenosos, gases neurotóxicos, detergentes, etc., están aniquilando a todas las especies vivientes del Océano.

Las aves marítimas y el Plancton tan indispensable para la vida, están siendo destruidos.

Incuestionablemente la aniquilación del Plancton Marino es de una gravedad incalculable porque este microorganismo produce el setenta por ciento del Oxígeno Terrestre.

Mediante la investigación científica se ha podido verificar que ya ciertas partes del Atlántico y del Pacífico se encuentran contaminadas con residuos radioactivos, producto de las explosiones atómicas.

En distintas Metrópolis del mundo y especialmente en Europa, el agua dulce se bebe, se elimina, se depura y luego se bebe nuevamente.

En las grandes ciudades "Súper-civilizadas", el agua que se sirve a las mesas pasa por los organismos humanos muchas veces.

En la ciudad de Cúcuta, frontera con Venezuela, República de Colombia, Sur América, los habitantes se ven obligados a beber las aguas negras e inmundas del río que carga con todas las porquerías que vienen de Pamplona.

Quiero referirme en forma enfática al río Pamplonita que tan nefasto ha sido para la "Perla del Norte" (Cúcuta).

Afortunadamente existe ahora otro acueducto más que abastece a la Ciudad, sin que por ello se deje de beber las aguas negras del río Pamplonita.

Enormes filtros, gigantescas máquinas, substancias químicas, tratan de purificar las aguas negras de las grandes ciudades de Europa, más las epidemias continúan propagándose con esas aguas negras inmundas que tantas veces han pasado por los organismos humanos.

Los famosos Bacteriólogos han encontrado en el agua potable de las grandes Capitales, toda clase de: virus, colibacilos, patógenos, bacterias de Tuberculosis, Tifo, Viruela, Larvas, etc.

Aunque parezca increíble dentro de las mismas plantas de agua Potabilizadoras de países Europeos, se han hallado virus de la vacuna de la Poliomielitis.

Además, el desperdicio de agua es espantoso: Científicos modernos afirman que para el año 1990 el humanoide racional morirá de sed.

Lo peor de todo esto es que las reservas subterráneas de agua dulce, se encuentran en peligro debido a los abusos del Animal Intelectual.

La explotación sin misericordia de los pozos de Petróleo, continúa siendo fatal. El Petróleo que se extrae del interior de la tierra, atraviesa las aguas subterráneas y las contamina.

Como secuencia de esto, el Petróleo ha hecho impotables las aguas subterráneas de la Tierra durante más de un siglo.
Obviamente como resultado de todo esto, mueren los vegetales y hasta multitud de personas.

Hablemos ahora un poco sobre el aire que tan indispensable es para la vida de las criaturas...

Con cada aspiración e inhalación, los pulmones toman medio litro de aire, o sea, unos doce metros cúbicos al día, multiplíquese dicha cantidad por los Cuatro Mil Quinientos Millones de habitantes que posee la Tierra y entonces tendremos la cantidad exacta de oxígeno que diariamente consume la humanidad entera, sin contar con el que consumen todas las otras criaturas animales que pueblan la faz de la Tierra.

La totalidad del Oxígeno que inhalamos, se encuentra en la atmósfera y se debe al Plancton que ahora estamos destruyendo con la contaminación y también a la actividad fotosintética de los vegetales. Desgraciadamente las reservas de oxígeno ya se están agotando.

El Mamífero Racional equivocadamente llamado hombre, mediante sus innumerables industrias está disminuyendo en forma continua la cantidad de radiación solar, tan necesaria e indispensable para la fotosíntesis, y es por esto que la cantidad de Oxígeno que producen actualmente las plantas, es ahora muchísimo menos que en el siglo pasado.

Lo más grave de toda esta tragedia mundial es que el "Animal Intelectual", continúa contaminando los mares, destruyendo el Plancton y acabando con la vegetación.

El "Animal Racional", prosigue destruyendo lamentablemente sus fuentes de Oxígeno.
El "Smog", que el "Humanoide Racional" está expulsando constantemente al aire; además de matar pone en peligro la vida del Planeta Tierra.

El "Smog", no sólo está aniquilando las reservas de Oxígeno, sino, además, está matando a las gentes.

El "Smog", origina extrañas y peligrosas enfermedades imposibles de curar, esto está ya demostrado.

El "Smog", impide la entrada de la luz solar y de los rayos ultravioletas, originando por ello, graves desórdenes en la atmósfera.

Viene una era de alteraciones climáticas, glaciaciones, avance de los hielos polares hacia el Ecuador, ciclones espantosos, terremotos, etc.

Debido no al uso, sino al abuso de la energía eléctrica en el año Dos Mil, habrá más calor en algunas regiones del Planeta Tierra y esto coadyuvará en el proceso de la Revolución de los Ejes de la Tierra.

Ya pronto los polos quedarán constituidos en el Ecuador de la Tierra, y este último se convertirá en Polos.
Deshielos de los Polos han comenzado y un nuevo Diluvio Universal precedido por el fuego se avecina.
En próximos decenios, se multiplicará el "Dióxido de Carbono", entonces este elemento químico formará una gruesa capa en la atmósfera de la Tierra.

Tal filtro o capa, absorberá lamentablemente la radiación térmica y actuará como un invernadero de fatalidades.

El clima de la tierra se hará más caliente en muchos lugares y el calor hará fundir el hielo de los Polos, subiendo por tal motivo el nivel de los océanos escandalosamente.

La situación es gravísima, el suelo fértil está desapareciendo y diariamente nacen doscientas mil personas que necesitan alimento.
La catástrofe mundial de Hambre que se avecina, será ciertamente pavorosa; esto está ya a las puertas.
Actualmente están muriendo cuarenta millones de personas anualmente por hambre, por falta de comida.

La criminal industrialización de los bosques y la explotación despiadada de Minas y Petróleo están dejando a la Tierra convertida en un desierto.
Si bien es cierto, que la energía nuclear es mortal para la humanidad, no es menos cierto que actualmente existen también, "Rayos de Muerte", "Bombas Microbianas" y muchos otros elementos terriblemente destructivos, malignos; inventados por los científicos.

Incuestionablemente para conseguir la energía nuclear, se requiere de grandes cantidades de calor difíciles de controlar y que en cualquier momento pueden originar una catástrofe.
Para lograr la energía nuclear, se requiere de enormes cantidades de minerales radioactivos, de los cuales sólo se aprovecha un treinta por ciento, esto hace que el subsuelo terráqueo se agote rápidamente.

Los desperdicios atómicos que quedan en el subsuelo resultan espantosamente peligrosos. No existe lugar seguro para los desperdicios atómicos.

Si el gas de un basurero atómico llegara a escapar, aunque sólo fuese una mínima porción, morirían millones de personas.

La contaminación de alimentos y aguas trae alteraciones genéticas y monstruos humanos: criaturas que nacen deformadas y monstruosas.

Antes del año 1999, habrá un grave accidente nuclear que causará verdadero espanto.

Ciertamente la humanidad no sabe vivir, se ha degenerado espantosamente y francamente se ha precipitado al abismo.
Lo más grave de toda esta cuestión, es que los factores de tal desolación, cuales son: hambres, guerras, destrucción del Planeta en que vivimos, etc., están dentro de nosotros mismos, los cargamos en nuestro interior, en nuestra Psiquis.

Samael Aum Weor / año 1975